Crecimiento Resiliente y Diplomacia Estratégica Impulsan los Mercados

La semana en Estados Unidos estuvo marcada por una intensa agenda económica, comercial y política con impacto global. En el frente diplomático, Washington y Canberra firmaron un acuerdo estratégico de USD 8.500 millones enfocado en el suministro de minerales críticos, especialmente tierras raras, para reducir la dependencia de China en sectores tecnológicos y de defensa. Además, la Casa Blanca confirmó que el presidente Trump se reunirá con su par chino Xi Jinping durante la próxima cumbre del APEC en Corea del Sur, con la intención de avanzar en acuerdos agrícolas, energéticos y temas vinculados a la guerra en Ucrania. En paralelo, Estados Unidos impuso sanciones a las petroleras rusas Lukoil y Rosneft, alineándose con la Unión Europea y elevando los precios internacionales del petróleo más de un 5%, con el WTI nuevamente por encima de los USD 60 por barril. Washington también anunció una investigación sobre el cumplimiento por parte de China del acuerdo comercial de Fase Uno de 2020 y evalúa imponer nuevas restricciones a las exportaciones tecnológicas dependientes de software estadounidense.

En el ámbito macroeconómico, los datos de inflación mostraron un alza anual del 3% en septiembre, ligeramente inferior a lo esperado, con una inflación subyacente estable. Estos resultados refuerzan las expectativas de que la Reserva Federal continúe su ciclo de recortes de tasas, con el mercado anticipando dos bajas adicionales antes de fin de año. Los indicadores PMI reflejaron expansión tanto en manufacturas como en servicios, con lecturas de 52,2 y 55,2 puntos respectivamente, señalando un crecimiento más sólido de la actividad. En tanto, las ventas de viviendas existentes aumentaron 1,5% en septiembre gracias al descenso de las tasas hipotecarias, aunque la confianza del consumidor cayó a su nivel más bajo en cinco meses, reflejando la cautela ante la incertidumbre económica y comercial.

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